Mañana me voy a la playita.. y no creo que actualice muy amenudo.. por no decir muy poco.
La verdad esqe... tengo ganas de escribir, pero no estoy muy segura de sobre que quiero hablar.
Estoy pocha hoy, no se que me pasa.
El roce de sus manos me volvio a recorrer suavemente la mandíbula bajando por el cuello, entre mis tetas hasta pararse en el ombligo. Su boca susurro un te quiero en mi oido mientras mis manos recorrian su ancha espalda y su lengua jugueteo a hacer formas indescrifrables por todo mi cuello.
Solo estábamos él y yo, nadie más. El va y ven de las olas nos mecia en la noche, mientras en la cama el calor, los susrros, las caricias y los besos estaban por todas partes. Le sentia encima de mi, le sentia por todo mi cuerpo, abrazandome, formando una presa que me impedia moverme, apartarme un centímetro de su piel.
Nos movíamos, a la par, para sentirnos aun más cerca, para formar completamente parte del otro.
Era mi primera vez. Pero era él, no tenía nada que pensar... Me concentre en el movimiento, el roce de su cuerpo junto al mio, en el aire que era fuertemente expulsado de sus pulmones, el aunmento de calor.
Se acabó, uno primero y el otro despues llegamos a nuestro climax, y se dejo caer encima mio.
Nos giramos hacía la derecha de tal forma que sus brazos me rodearon por la espalda, y su aliento se enrredaba con mi pelo.
Nadie, más, con nadie más podría compartir algo asi en mucho tiempo. Y lo peor de todo era saber que al día siguiente estaría demasiado lejos de él y de aquel pequeño sueño que me había robado. Kilómetros de distancia estarían entre nosotros y yo no podría hacer nada.
Al minuto despues y con una lágrima resbalando por mi mejilla, estaba dormida entre sus brazos.